La Cumbre manifiesta que el momento actual tiene muchas oportunidades y sobre todo es una obligación política, poder contribuir de forma decidida en todos los escenarios donde se construye la paz. En el marco de la Paz Total, se hace necesario que las mujeres actuemos como protagonistas políticas en los distintos procesos de diálogo y negociación, y frente a la construcción de políticas que conlleven a las condiciones de paz y reconciliación en Colombia.
En el marco de la participación que como Cumbre Nacional de Mujeres y Paz se tiene el CNP y desde el trabajo mancomunado con la Red Nacional de Mujeres, la Juntanza de Mujeres y Paz, Sintracihobi,Colombia Diversa, la Plataforma LGBTI por la Paz y la Plataforma Alianza de Organizaciones Sociales y Afines, se hace entrega de algunas recomendaciones, como:
- Garantizar la paridad en la conformación de mecanismos de delegación, toma de decisión y vocerías en todos los escenarios derivados del CNP.
- Garantizar las condiciones de seguridad necesarias con activación de rutas y protocolos ante cualquier situación de riesgo o amenaza.
- Garantizar la participación sustancial en todos los procesos de toma de decisión, implementación y seguimiento, de todas las mujeres en sus diversidades.
- Realizar un trabajo pedagógico previo y posterior con las personas convocadas a los encuentros, para la consolidación de una agenda propia frente a los intereses y necesidades que fortalezca herramientas y conceptos para el reconocimiento de las voz de las mujeres.
- Construir metodologías, herramientas, piezas pedagógicas y comunicativas con enfoque de derechos de las mujeres, y el reconocimiento de las experiencias previas de las mujeres en escenarios de participación y de construcción de paz.
- Facilitar el acceso a la participación de las mujeres a través del cuidado de niños, niñas y adolescentes.
- Garantizar las condiciones materiales para desplazamiento, hospedaje y alimentación para la asistencia a los encuentros.
- Garantizar en el desarrollo de las actividades, moderación y relatorías la identificación de los efectos desproporcionados que han enfrentado las mujeres en el contexto del conflicto armado.
- Construir los materiales de difusión y pedagógicos del proceso con lenguaje inclusivo y no sexista.
- Garantizar la presencia de las mujeres en las discusiones sustanciales para las tomas de decisión.
- Garantizar que las propuestas que las mujeres entregan en estos escenarios se incluyan y materialicen en las metodologías de participación y en todos los resultados del proceso.
- Establecer medidas y mecanismos orientados a la adaptabilidad de la metodología a cada territorio que priorice la diversidad poblacional presente.
- Diseñar e implementar mecanismos de prevención de cualquier conducta de acoso, sexismo, racismo, heterosexismo y clasismo en el proceso previo, durante y posterior a los encuentros.
- Monitorear la situación de las mujeres y las condiciones de seguridad al retornar a sus territorios.
- Establecer un protocolo de seguridad con medidas específicas para las mujeres que participen en los encuentros.
- Desarrollar escenarios de devolución, socialización, retroalimentación y en general, mecanismos de seguimiento de las propuestas priorizadas en los encuentros, con el fin de identificar y reconocer los aportes de las mujeres.
Desde la Cumbre se subraya la importancia de mantener el diálogo entre las comunidades y procesos impulsados por el Comité Nacional de Participación. Se destaca que el mecanismo actual puede servir como un escenario para ampliar voces y reflexionar profundamente sobre la participación, aprovechando los diálogos existentes en los territorios sobre temas étnicos, de seguridad y ambientales.
Como una alianza colectiva y diversa de mujeres, seguiremos contribuyendo y promoviendo los diálogos en marcha, así como aquellos que estén por venir, en aras de construir el país que las mujeres soñamos.