En la historia reciente de Colombia están presentes varios procesos de paz que han tenido como intención poner fin al conflicto armado que ha vivido el país por más de cincuenta años. El primero de estos procesos actuales, se inició en octubre de 2012 y fue entre el Gobierno Nacional y la guerrilla de las FARC-EP, quienes luego de 4 años, en el 2016, lograron la firma de un Acuerdo Final que llevó a las FARC a la dejación de las armas y a la trasformación de su grupo a partido político. Actualmente, el país transita por la fase inicial de su implementación, para el cual se tienen contemplados 15 años para su total desarrollo.
Por otra parte, se encuentran los recientes diálogos entre el Gobierno Nacional y la guerrilla del ELN, quienes llevaban un proceso de acercamiento desde hace más de 4 años, logrando concretar un inicio de negociaciones formales en febrero de 2017. Hasta el momento, el principal, pero además histórico primer pacto de este diálogo, es el cese bilateral al fuego que tendrá una duración de 102 días y estará vigente hasta el 12 de enero del 2018.
Los diálogos con estos dos grupos guerrilleros han marcado en la actualidad de Colombia una oportunidad para la reconstrucción del tejido social de las poblaciones que vivieron las consecuencias directas del conflicto armado y se han convertido en un aliciente para la construcción de paz en todo el territorio colombiano.
La sociedad civil se encuentra expectante frente a dichos procesos y espera que estos aporten a la consolidación de las bases que permitan disminuir las brechas de desigualdad que existen en el país. Sin embargo, para alcanzar de manera exitosa la consolidación de los mismos y su real implementación, se requiere no solo la voluntad de las partes en negociación, sino una participación real y activa de toda la población colombiana, que permita el entendimiento común de que la Paz solo es posible si es una búsqueda colectiva.
¡A defender la Paz! es una iniciativa de la Cumbre Nacional de Mujeres y Paz que busca visibilizar ante la opinión pública el significado que tiene la Paz para las Mujeres y lo que esta representa para ellas y sus territorios.
Es una voz de alerta desde las Mujeres que busca convocar a la población colombiana para que exija su derecho a una vida libre de violencias, pero, además, es un llamado a que aporten mediante acciones al entendimiento y a la narrativa común de la búsqueda de la paz.
Las Mujeres organizadas en la Cumbre Nacional de Mujeres y Paz, desde nuestras diversidades y múltiples expresiones, reafirmamos nuestro compromiso histórico con la construcción de la paz en la búsqueda de un país donde todas las personas, sin distinción alguna, podamos disfrutar del goce efectivo de nuestros Derechos humanos.
Como un acto de empatía y solidaridad con los territorios que han vivido el conflicto, las Mujeres estamos ratificando con esta campaña que necesitamos la paz para defender la vida, para afianzar la democracia con la participación y la representación activa de las Mujeres en el proceso de construcción de la paz.
La Cumbre Nacional de Mujeres y Paz ejerce actualmente control social y veeduría ciudadana permanente frente al cumplimiento en la implementación del Acuerdo sobre los derechos de las Mujeres para la paz local, regional y nacional. Adicional a ello, las Mujeres llevamos años de lucha buscando mitigar los efectos de la guerra en nuestros cuerpos, llevándonos esto, a convertirnos en sobrevivientes y constructoras de paz desde nuestros hogares, comunidades y territorios; por eso hoy, y seguras de la autoridad que tenemos por nuestro trabajo, nos unimos nuevamente para enviar un mensaje a toda la sociedad colombiana por medio de la campaña ¡A defender la Paz!